La característica fundamental de este helado es que, además de estar “murrico”, hacerlo es tan fácil que esto casi ni se puede considerar una receta.
Sólo necesitas los siguientes ingredientes:
– 200 ml (un botellín o un brik pequeño) de nata para montar del 35,1% de M.G.
– 500 ml (un pack de 4 envases de 125 ml cada uno) de natillas de tu marca preferida o bien de tus natillas caseras más ricas,
– canela en polvo (opcional),
– galletas maría o digestive (opcional).
La nata ha de estar fría, fría. Vamos, que por lo menos haya estado en el frigo desde el día anterior. Y las natillas también (si las haces tú, hazlas de un día para otro y guárdalas en el frigo).
Sacas la nata del frigo y la montas con unas varillas (muy poquito, sólo hasta el punto de dejar huella en la nata cuando llevantes las varillas). Incorpora las natillas a la nata montada (si son caseras, las echas “a cholón” y si son compradas, vacías los envases a discreción). Si usas natillas compradas y llevan galleta, retira las galletas antes y resérvalas.
Con mucho cuidado y mimo, junta la nata con las natillas con movimientos envolventes, hasta que no se vean franjas blancas de nata.
Si tienes heladera, vierte la mezcla en ella siguiendo sus instrucciones hasta que el helado se haya hecho. Si te apetece, un poquito antes de que el helado haya “cuajado” del todo, añade las galletas maría troceadas y remueve para que se mezclen. No queda muy bonito a la vista pero está buenísimo.
Si no tienes heladera, tendrás que echar la mezcla en un recipiente de la suficiente capacidad y llevarla al congelador. Cada media hora más o menos, sacas el recipiente y remueves el helado. Unas cuantas veces. Hasta que esté “hecho”. En el antepenúltimo meneo, si quieres, añades las galletas.
Yo he lavado los vasitos de plástico de las natillas mientras el helado daba vueltas en la heladera y los he secado. He echado el helado en ellos cuando estaba listo, he añadido canela en polvo por encima, he plantado una galleta “en tó lo arto” y los he metido al congelador. Los puedes consumir recién hechos, sin meterlos antes al conge, de la maquinita a la mesa. Mucho más cremosos y con todo el sabor.
Ea. Helado de natillas listo para degustar. Con barquillos, con cucuruchos, con canela, con trocitos de galletas, con virutillas de chocolate… Con lo que se te pase por la imaginación, que para eso los has hecho tú.
Yo he sido un poco burráncana y le he plantado una galleta digestive encima porque no tenía otra. Está rica, pero casi hay que usar la radial para meterle mano al helado. Casi mejor ponle una galleta María. 😉
Los trocitos de galleta en el propio helado tampoco están nada mal. Le dan textura aunque no queden bonitos de la muerte. Se me ocurre que un chorrillo de salsa de caramelo le puede dar un buen punto al helado también. Es cuestión de probar…
¡¡ Buen provecho !!
Me encantan estas pequeñas grandes ideas!!! Ya la he copiado en mi libretita de apuntes. Esta semana cae sí o sí!!! Muchas gracias!!! Mari Paz del blog http://www.pazygloriaenlacocina.blogspot.com
Jejejeje si es que esto del veranico nos da por el helado, tomo nota de tu helado molon y meloapunto toito to 😉
Tengo que sacarle partido a la mia 😉 besazo gordo
Qué buena idea y qué fácil 🙂
Gracias por compartirla.
Que rico, me lo apunto porque este año por fin tengo heladera, yuuupi! y ya me he extrado con un par de ellos, pero este de natillas debe ser lo más.
Besos
Me gusta mucho esta idea del helado de natillas, y me da a mi, que con natillas de chocolate, debe ser brural!!!
Madre mía… Esto totalmente de acuerdo contingo.
Justo hice natillas hoy,… debería haber hecho el doble para probar. Me lo apunto
Para la próxima. 🙂
Eres tan divertida explicando la receta que dan ganas de hacerla ipso facto!
😉
lo he hecho y la verdad que esta requeteriquisimo , con tu permiso quiero publicar la receta en mi blog con referencia al tuyo-
saludos
Permiso concedido. 😉
gracias, lo he publicado ya. saludos
Que receta más rica, se me hace la boca agua! Me encanta el mundo de la repostería. Este fin de semana pruebo tu receta sin lugar a dudas